sábado, 18 de julio de 2009

Juguetes sexistas

Hace unas semanas fue el cumpleaños de la hija de una amiga. Como pasa siempre en estas ocasiones la mayoría de sus regalos eran los típicos de "niña": muñequitas, un jueguecito de limpieza chulisimo, con escoba, fregona, cubo, etc. Ningún camión.
Lo que más me llamó la atención fue el kit de limpieza, primero por lo completo que estaba, de profesionales pero en miniatura. Segundo porque todo el mundo da por hecho que eso es un regalo de niñas. Y entonces pienso que mi sobrino de 2 años tiene una cocina de juguete, ¿es eso sexista?
Somos nosotros los que le damos el significado a los juguetes. Una escoba o una cacerola no tienen connotaciones de género, igual que un camión (que la próxima vez se lo regalo).
Yo intento ser muy cuidadosa con estos temas. Me gusta regalar cosas educativas sin ningún tipo de referente de género, pero, y si fuera al revés? Haré la prueba, regalaré camiones a las niñas y planchas o cocinitas a los niños, a ver la cara de los padres...
Los niños pequeños imitan lo que ven. Si mamá (o papa) está todo el día planchando se divertirán con una plancha, y si quieres que te dejen barrer regálales una escoba de juguete y se acabaron los problemas. Eso cuando son pequeños. Pero, ¿a que edad se les dice a los niños que ya no pueden seguir imitanto a papá o a mamá para que sean fieles a su género? Claro, eso depende de cómo sean los padres. Si papá es el encargado de tener el suelo limpio, como es mi caso, regalarle una escoba a mi hija sería para que imitara a su padre, y un ordenador para que me imitara a mi (que entre unas cosas y otras me paso el día aquí pegada...)
El caso es que de tanto pensar ya no sé cuales son o no los juguetes sexistas.
Lo que tengo claro es que no me gustaría que mi hija tuviera Barbies o Bratzs o las que le toquen cuando le llegue al edad (por exaltar un prototipo femenino que no comparto) o juguetes bélicos, que por suerte son de niños y no creo que nadie me venga regalando tanques o guantes de boxeo.

martes, 14 de julio de 2009

Canguradicta

Pues eso, que cangurear para mi se ha convertido en una adicción. Tanto, que no soporto ver a los niños en sillitas, con lo agustito que están en brazos!!! Y es que desde que me hice con mi meitai mi vida cambio. De lo único que me arrepiento es de no haberme animado hace meses, la de tiempo y de abrazos que nos hemos perdido!!!

Pero adicción aparte (una que es mamá empalagosa, qué le vamos a hacer), esta sociedad empeñada en separar a las madres de sus hijos está haciendo seres totalmente inexpresivos, ¿o es que acaso nadie se ha fijado en que los niños cuando van en sus sillas casi no se rien? Bueno, ellos sí que se expresan, lloran, pero como "hay que dejarles llorar, no los malacostumbres" pues eso, a alejarlos más de su madre, padre o figura afectiva que se precie, no los vayamos a contaminar con todo nuestro cariño. Pues no, así no son las cosas. Para mi lo más maravilloso del mundo es llevar a mi hija en brazos, con el foulard o en su meitai, ir hablando con ella, cantando, jugando a chocar las palmas de las manos, y viendo como se ríe a carcajadas. Eso me hace feliz, la mujer más feliz del mundo, es lo que tiene la maternidad. Da igual que ahora le haya dado por no dormir y nos tenga con ojeras, paseamos, nos reimos juntas y todo se olvida.

Además de estar enamorada hasta lo más fondo de mi hija, tengo un amante secreto, mi meitai. Sí, es el mejor invento del mundo, y como tantas cosas buenas, viene de Asia. Si los chinos saben mucho, y esto sí que no es copia. Así que a continuación expongo las razones por las cuales el meitai es el mejor invento de esa parte del mundo, mejor incluso que los fuegos artificiales y los rollitos de primavera:

- Con un meitai, como con cualquier portabebe, el niño está a la altura de los adultos, se "relaciona" mejor con ellos, ve más el mundo y por lo tanto mejora su percepción de las cosas.

- Se afianza la relación con su portador, en la silla el niño va hacia adelante, al tenerlo en brazos es inevitable hablar con ellos, sonreirles, jugar, etc. Sin duda ellos son más felices.

- Los portabebes tradicionales, como los fulares, pouch, meitais y sus demás continuadores modernos son respetuosos con la fisonomía del bebe, mantienen la posición ranita en sus piernas yendo sentados, en vez de ir colgando de los genitales y con la cadera forzada. Por eso están tan agustito!

- Puedes entrar en las tiendas sin problemas y sin obstaculos. Bueno, ellos pueden alcanzar mejor algunos productos que "alejan" de los niños, jejeje, es más divertido (sobretodo en los kioscos, la de cositas que apaña la enana!)

- Olvidate de las tronas portatiles o de depender de los restaurantes. El meitai extendido sobre la silla, se atan bien los lazos y el niño no se va para ningún lado. Un aparato menos que cargar cuando nos vamos de viaje.

- Complemento indispensable en el coche, sirve de mantita, de persiana, de juguete...

- Lo rico que es ir al parque y tirarse en la hierba, sobre el meitai y que no piquen las hojas!

- Alex dice que al mantener la espalda rígida siente que desde que la lleva ha mejorado su dolor de espalda.

- Y lo mejor de todo, artesanal y baratísimo.

Hasta ahora le he encontrado estas utilidades. Tanto es así que no he vuelto a usar la silla de paseo desde que lo tenemos. Así que para las que aún lo estais pensando, de lo único que os vais a arrepentir es de no haberlo descubierto antes.

TODAS A CANGUREAR!!!

miércoles, 1 de julio de 2009

Despeinada

Esto me lo acaba de enviar mi queridísima Kel (te quiero muuuucho). Me encantó y me apetece compartirlo:

VIVIR DESPEINADA


Hoy he aprendido que hay que dejar que la vida te despeine, por eso he decidido disfrutar la vida con mayor intensidad… El mundo está loco. Definitivamente loco…
Lo rico, engorda. Lo bonito, sale caro. El sol que ilumina tu rostro, arruga.
Y también he aprendido que lo realmente bueno de esta vida, despeina:

- Hacer el amor, despeina.
- Reírte a carcajadas, despeina.
- Viajar, volar, correr, meterte en el mar, despeina.
- Quitarte la ropa, despeina.
- Besar a la persona que amas, despeina.
- Jugar, despeina.
- Cantar hasta que te quedes sin aire, despeina.
- Bailar hasta que dudes si fue buena idea ponerte tacones altos esa noche, te deja el pelo irreconocible…

Así que cada vez que nos veamos yo voy a estar con el pelo despeinado…, y, sin embargo, no tengas duda de que estaré pasando por el momento más feliz de mi vida.

Es ley de vida: siempre va a estar más despeinada la persona que elija ir en el primer carrito de la montaña rusa, que la que elija no subirse.

Puede ser que me sienta tentada a ser una mujer impecable, peinada y planchadita por dentro y por fuera. El aviso clasificado de este mundo exige buena presencia: Péinate, ponte, sácate, cómprate, corre, adelgaza, come sano, camina derechita, ponte seria… Y quizá debería seguir las instrucciones pero ¿cuando me van a dar la orden de ser feliz? Acaso no se dan cuenta que para lucir bonita, me debo de sentir bonita… ¡La persona más bonita que puedo ser! Lo único que realmente importa es que al mirarme al espejo, vea a la mujer que debo ser.

Por eso mi recomendación a todas las mujeres (y porqué no a los hombres): Entrégate, Come rico, Besa, Abraza, Haz el amor, Baila, Enamórate, Relájate, Viaja, Salta, Acuéstate tarde, Levántate temprano, Corre, Vuela, Canta, Ponte guapa, Ponte cómoda, Admira el paisaje, Disfruta, y sobre todo, deja que la vida te despeine!!!

Lo peor que puede pasarte es que, sonriendo frente al espejo, te tengas que volver a peinar.

Me gusta verte despeinada

Respetar las tradiciones

A raiz de un foro en el que salió el tema de los pendientes en las niñas, he estado pensando mucho en las tradiciones y sobretodo en cuales heredara mi hija. Vale, le he puesto los pendientes por que me gustan, pero sobretodo porque donde vivo, en mi cultura, es tradición que las niñas desde pequeñitas lleven pendientes. Y además de esa... ya. No hay ritos, no hay nada más de tradición que eso en la vida de mi hija.

A veces pienso si les estamos dejando a nuestros hijos una sociedad tan libre e impoluta que acabe por ser aburrida. En España, además, las tradiciones o son religiosas o conllevan maltrato animal, así que tampoco le veo razón. Afortunadamente nos queda la parte mexicana, dia de muertos, piñatas, y unas navidades con miles de actividades no religiosas por hacer. En España comemos, comemos y los que pueden y quieren se emborrachan. ¿Pero que pasa con los niños que no tienen contraparte cultural y sólo se quedan con la comida, la bebida y el maltrato animal?

Y si todas las tradiciones que implican maltrato animal o hacia nuestro propio cuerpo desaparecen, ¿nos quedaremos sin tradiciones? y la del premio gordo ¿son buenas las tradiciones? Desde mi perspectiva sociológica sí, es importante mantener las tradiciones porque producen una suerte de cohesión social muy beneficiosa para la convivencia. En México lo tengo claro, la mayoría de las tradiciones que conozco y practico son inocuas para la salud y para el medio ambiente. Pero, ¿en España? ¿nos estaremos quedando sin tradiciones? Por más que busco no encuentro nada sano que hacer aquí con mi hija, nada culturalmente heredable quitando música, algún cuento y la obsesión por la comida que reina por estos lares.